domingo, 30 de junio de 2013

martes, 4 de junio de 2013

Un pequeño deseo estival


Buenos días, caballero.
Me comía yo hoy una paella
con gambas peladas frente al mar.

Eso si yo no fuese yo,
si no nos pasase lo de siempre,
si no fueran las 12 de la mañana
Y tuviera esta resaca.

Iría a pasear por la arena
a fortalecer tus pies y mi alma,
a tostar tu piel y mis orejas,
a leer tus versos y a dormir con letras,
a gritarle al sol, a bailar las olas,
a romper tu voz, a encontrar la mía.
Y entonces le gritaría yo:
hoy te esperaré dormida.

Si yo no fuese yo.
Si no estuviera tan dormida.

Autora: Ruth F.

domingo, 2 de junio de 2013

20 minutos inexpugnables



Se ha postrado ahí,
tu coche.
Frente a los barrotes de cobre
que me separan de la vida.

Has vuelto en esta mañana casual,
has vuelto como te fuiste,
con tu silencio hecho incienso.

Ahora que lamo tu abandono
desde esta cuneta,
desde este rincón oscuro donde me dejaste aullando .

Ahora que tu huida ha borrado el
color de tus ojos
y embarra tus alas azules.

Ahora veo tu Peugeot ahí enfrente,
aparcado, en vigilia.

Ahí yace.
Son 20 minutos inexpugnables
frente a los barrotes de cobre
que me separan de ti.

Luego he pensado en tu madre.

Es decir,
lo mismo le habías dejado el coche.

Foto: Asturias, marzo 2013.